Feriantes, agricultores, organizaciones de productores, técnicos, universidades e instituciones participaron del 2° Encuentro nacional de Ferias Francas y Mercados Solidarios que se realizó durante tres días en Corrientes. Allí, más de 2.500 feriantes comercializaron desde pescados, azúcar, yerba, arroz, frutas y verduras, hasta productos artesanales y regionales. De la apertura participaron Emilio Pérsico –Subsecretario de Agricultura familiar–, Carlos Espínola –Intendente de la ciudad de Corrientes– y José Luis Russo –Director del Centro Regional del INTA en Corrientes–.

“Los mercados solidarios y populares son una muestra más de que es posible generar alternativas social y ambientalmente sustentables de producción y comercialización para la agricultura familiar”, señaló Diego Ramilo, Gerente del ProFeder.

Para Ramilo, las ferias francas nacieron como una “alternativa de diversificación y comercialización de las producciones familiares sin intermediación que, además, permite mejorar las condiciones y calidad de vida, tanto de los productores como de los consumidores que acceden a productos de base agroecológica con calidad diferenciada”.

Trabajo genuino

Las ferias francas y los mercados solidarios son experiencias de comercialización alternativa, donde el consumidor toma conciencia de la oportunidad de adquirir alimentos frescos y sanos producidos en la proximidad de su lugar de residencia.

Rocío Módena, productora de Zárate –Buenos Aires–, trabaja junto con el INTA en la elaboración de comida naturista como budines de zanahoria, hamburguesas de quinoa, trigo, avena y brócoli, milanesas de soja, panes semillados integrales,  buñuelos de zapallo y zanahoria, entre otros. “Gran parte de la materia prima que utilizo, la saco de mi huerta. Todo lo que hago es sin ningún tipo de químicos”, aclaró.

Módena resaltó la oportunidad de participar en el encuentro nacional, “agradezco al INTA la oportunidad de estar acá. Realmente es muy gratificante porque interactuas con mucha gente, sacas ideas e intercambias recetas. Todo eso después lo llevás a tu trabajo y te hace crecer un montón”, aseguró.

De acuerdo con Ramilo, las ferias francas nacieron como una alternativa de diversificación y comercialización de las producciones familiares.

Desde Santo Tomé –Corrientes–, Roque Ortega, integrante de la asociación 20 de Junio que reúne a unos 60 pequeños productores, destacó la mística y el valor de la agricultura familiar. “Es algo extraordinario, una grandísima ayuda para los pequeños productores. Te das cuenta que todo lo que se produce es de uno y te ganas la vida con tus propias producciones, esto te dignifica enormemente”, y señaló el trabajo articulado que realizan junto con el INTA,  la municipalidad y el Ministerio de la Producción de Corrientes.

La diversidad de la agricultura familiar

Durante el fin de semana, el INTA Sáenz Peña –Chaco– fue sede de la Expo Agricultura Familiar. Un encuentro dedicado a la exposición de tecnologías productivas y maquinarias para pequeños productores.

Del acto de apertura participaron Jorge Capitanich –gobernador de Chaco–,  Carla Campos Bilbao –Secretaria de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar de la Nación–, Eduardo Delssin –Director del Centro Regional del INTA Chaco-Formosa y Aldo Wuthrich –Director de la Experimental del INTA en Sáenz Peña–.

De acuerdo con Wuthrich, el encuentro buscó “mostrar la diversidad de actividades que realiza la agricultura familiar y, además, valorizar el trabajo, que son saberes que se transmiten en la familia. Aquí el rol del INTA es acompañarlos y ayudarlos a mejorar el perfil técnico de las actividades”.

Más de 2.500 feriantes comercializaron desde pescados, azúcar, yerba, arroz, frutas y verduras, hasta productos artesanales y regionales.