La innovación tecnológica del INTA, presente en Tucumán
Francisco Anglesio, vicepresidente del organismo, disertó sobre el modelo de gestión de innovación institucional en un encuentro internacional de abogacía estatal, del que participó la presidente Cristina Fernández junto con otras autoridades y funcionarios nacionales.
“Desde 2003 el INTA tuvo una explosión de crecimiento que ha ido impactando en la Argentina, gracias al apoyo del Estado nacional. Para nosotros, la innovación es sinónimo de desarrollo”, afirmó Francisco Anglesio, vicepresidente del instituto, durante las 2das Jornadas Internacionales La abogacía estatal y el control gubernamental como pilares de las políticas públicas, que desde el miércoles y hasta hoy se realizan en San Miguel de Tucumán.
El encuentro reúne a especialistas de alto nivel académico del país y del exterior, así como interlocutores clave del ámbito político que actúan como mediadores entre la sociedad y el sector gubernamental. Cristina Fernández de Kirchner, presidente de la Nación, participó de las jornadas vía videoconferencia y, además, estuvieron representadas todos los ministerios nacionales.
Anglesio participó en el primer panel de la mañana, dedicada a la ciencia y la tecnología, junto con el director general de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Ciencia, Técnica e Innovación Productiva de la Nación, Martín Calleja, y Jimena Muñóz, representante del programa Red de Argentinos Investigadores y Científicos en el Exterior (Raíces), de esa misma cartera.
Tras un breve repaso de la historia del INTA, el vicepresidente destacó algunos datos representativos del crecimiento general de un 126 por ciento en el sector agropecuario registrado en la última década, que consolidaron al país como “el octavo productor mundial de alimentos y proyectamos que en los próximos diez años podremos producir para 600 millones de personas”, considerando que, actualmente, “tenemos 40 millones de habitantes y materia prima para alimentar a 400 millones”, explicó.
En el mismo sentido, precisó que, entre las campañas de 2003 y 2010, la Argentina incrementó su producción de granos en un 41 por ciento, un 22 por ciento en la lechería y, en el caso de la carne aviar, un 139 por ciento. “Obviamente que estas cosas no las hemos hechos solos”, dijo, “sino con el fuerte apoyo del INTI, del Ministerio de Agricultura y las distintas reparticiones provinciales juntamente con las organizaciones de productores”.
En esta línea, el funcionario indicó que ese crecimiento se observa más allá de la producción primaria: “Llegamos a exportar maquinaria agrícola por 200 millones de dólares y una empresa argentina lidera el mercado de tractores por primera vez en treinta años, que en 2011 vendió 1.250 unidades fuera del país”.
Asimismo, Anglesio se refirió al aumento presupuestario del INTA y lo contrastó con uno sólo de los proyectos institucionales, el de Eficiencia de Cosecha y Poscosecha, que permite recuperar en un año 3.290 millones de pesos. “Esto muestra claramente que cuando se tiene la decisión política de invertir en desarrollo, tecnología y capacidad, podemos multiplicar por dos o por tres la plata que invertimos y recuperarla rápidamente”, expresó.
También subrayó la relevancia de contar con “ministerios como el de Ciencia y Técnica y el de Agricultura de la Nación, lo cual refleja de la definición de políticas de Estado asumidas en 2003 y que dota de herramientas y jerarquización para el fortalecimiento de las estructuras institucionales” y, añadió luego, de la sinergia lograda por “el trabajo con múltiples actores como productores, asociaciones, empresas y redes”.
Durante su exposición, el vicepresidente también abordó algunas áreas innovadoras del trabajo institucional, como la agricultura periurbana y familiar, el soberanía alimentaria y el Pro-Huerta, “un programa fundamental llevado adelante desde hace más de 20 años junto con el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación que se exportó a varios países, como Haití, donde gracias a eso se alimentan 11.500 familias”, dijo Anglesio. Del mismo modo, mencionó el trabajo del INTA en términos de prospectiva, “para pensar en los posibles escenarios que se vienen y poder estar bien posicionados hacia 2030”, y destacó los vínculos internacionales del organismo con proyectos compartidos entre institutos científicos como la Embrapa y Agropolis, entre otros.
Organizado por la Procuración del Tesoro de la Nación y la Sindicatura General de la Nación, junto con organismos de la provincia, las jornadas buscaron “generar vínculos institucionales y académicos para abordar temáticas de abogacía estatal y control de gestión, que tiendan a perfeccionar los servicios jurídicos y las instancias de control, en defensa del interés nacional y el bienestar colectivo”, señalaron los organizadores.
Foto: Gentileza Paola Busti, prensa Sigen
Francisco Anglesio, vicepresidente del INTA (fragmentos del discurso)