Alfalfa, tres opciones más para la ganadería
Con un rendimiento de materia seca 25% superior a otras variedades, gran potencial productivo y muy buena persistencia se presentaron los tres cultivares desarrollados por el INTA Manfredi.
El grupo de Mejoramiento genético de especies forrajeras del INTA Manfredi –Córdoba– inscribió tres nuevos cultivares de alfalfa: Limay PV INTA, Pulmari PV INTA y Traful PV INTA. Con alto potencial de producción forrajero, muy buena persistencia –duran de 3 a 5 años con un buen manejo– y buen comportamiento en general a plagas y enfermedades, se destacaron por registrar un rinde 25% superior a variedades similares.
De acuerdo con Daniel Basigalup, especialista de esa unidad del INTA y obtentor de los cultivares, destacó la importancia de “desarrollar materiales adaptados a nuestras condiciones de clima, suelos, manejo y a las necesidades que tienen los productores”.
La alfalfa es una herramienta muy importante en la actividad tambera y ganadera, ya sea por medio del pastoreo directo o la elaboración de reservas forrajeras, constituyen la base en la dieta de la producción bovina.
“Con flores color púrpura, hojas trifoliadas, buena capacidad de rebrotar después del pastoreo o corte, los cultivares se adaptan, en general, muy bien a toda la zona productora y poseen muy buena tolerancia a las principales plagas: pulgón verde, azul y moteado”, expresó Basigalup.
Según Basigalup, las nuevas variedades producen forraje de alta digestibilidad y bajo contenido de fibra, con buena proporción de hojas. “Los tres cultivares se encuentran dentro de los parámetros esperables en cuanto a digestibilidad y proteína bruta. En comparación con otras variedades”.
En detalle
El mercado de las alfalfas está en desarrollo debido a que la mayoría de las variedades que existen en nuestro país corresponden a líneas extranjeras.
“Traful PV-INTA es una nueva alfalfa del grupo 9 –menor sensibilidad al invierno– y es altamente tolerante a los ataques de pulgón negro. Posee una muy buena sanidad de hoja y de tallo y una adecuada relación hoja/tallo”, describió el especialista del INTA.
En el caso de Limay PV-INTA tiene muy buena producción de materia seca y se adapta muy bien a suelos pesados, anegadizos, con alto contenido de arcilla y otros materiales finos como los suelos entrerrianos y los de la cuenca Norte de Buenos Aires. Además, tiene alta velocidad de rebrote y gran adaptación a sistemas de pastoreo intensivo y henificación.
Asimismo, con un reposo invernal más marcado y una mayor tolerancia al frío, Pulmarí PV-INTA es una alfalfa del grupo 7. Se destaca por ser muy plástica en su adaptación, ideal para la región pampeana Sur y Patagonia, muestra un excelente comportamiento para esquemas de pasturas consociadas con otras especies.
Las tres variedades fueron recientemente inscriptas en el Registro Nacional de la Propiedad de Cultivares del INASE –Instituto Nacional de Semillas– y su multiplicación y comercialización se realizará mediante un convenio de vinculación tecnológica con la empresa Palo Verde SRL.