20 de diciembre de 2010

El INTA sabe de Innovar

La institución fue distinguida por el Ministerio de Ciencia con el premio Innovar 2010, por su trabajo en vinculación tecnológica y el desarrollo de una cosechadora para pequeños productores.

“La satisfacción es completa cuando el trabajo diario sirve para que muchos pequeños y medianos productores se consoliden en su territorio, no pierdan su cultura e identidad”, expresó Orlando Pilatti –técnico del INTA Reconquista, Santa Fe– sobre la Cañera INTA que junto a la coordinación nacional de Vinculación Tecnológica obtuvieron el premio INNOVAR 2010 que entrega el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación.

“La coordinación nacional de Vinculación Tecnológica del INTA es pionera en realizar alianzas entre el Estado y las empresas privadas. Es por esto que el jurado destacó el carácter innovador de nuestra línea de trabajo que desde 1986 tiene la brújula puesta en el crecimiento a futuro como lo es los trabajos que ya venimos realizando en cluster o parques tecnológicos”, explicó Adolfo Cerioni, coordinador nacional del área.   

Según los organizadores del concurso: “Al premio INNOVAR se presentan cientos de proyectos que se someten a un proceso de evaluación, destinado a seleccionar a los que formarán parte de la exposición y a consagrar a aquellos que, adicionalmente, serán destacados con un premio. Para llevar a cabo este proceso de evaluación se articula el consejo y experiencia de las instituciones del sistema nacional de CTI (ciencia tecnología e innovación)”.

“Los proyectos que llegan a INNOVAR pasan por un proceso de evaluación de distintos grados de profundidad de gran importancia para aquellos que se proponen lanzar un nuevo producto. INNOVAR contribuye a consolidar un ambiente proclive a la innovación en la sociedad”, destacaron.

Capitalizar los conocimientos

Es en este marco que el INTA obtuvo dos galardones: en la categoría innovaciones en el agro en el que fue distinguido Pilatti por la cosechadora de caña de azúcar entera, y en vinculación y transferencia de tecnología la distinción fue para la coordinación nacional de Vinculación Tecnológica.

Cañera INTA –que comenzó su proceso en 2007– representa un aporte para resolver la problemática de cosecha de la caña de azúcar para más de 1.500 productores de pequeña a mediana escala del área central cañera de Tucumán, y de gran número en otras regiones. Adecuada a la agricultura familiar, se adapta a las producciones de pequeños espacios y su costo es una fracción menor al de una cosechadora integral.

Pilatti indicó que “la intención fue desarrollar una máquina sencilla que se adecue a las características de producción de la agricultura familiar, generalmente condicionadas por la extensión del predio y los bajos recursos económicos”.

Por su parte, la Vinculación Tecnológica del INTA está orientada a crear vínculos perdurables con el sector privado –especialmente empresas PyMEs de capital nacional–, otorgar sustentabilidad y previsibilidad al sistema innovativo, procurar y promover el crecimiento tecnológico y económico de las partes. “En los últimos años trabajamos con éxito en emprendimientos como el arroz Puitá, desarrollos de vacunas o la cosechadora de algodón Javiyú desarrollada por la unidad de Reconquista –Santa Fe–“, ejemplificó Cerioni.

El INTA capitaliza sus conocimientos y capacidades, valoriza los resultados de la investigación y el know how transferido a su socio, generando nuevas tecnologías con los recursos que provee la empresa y que ésta vuelca en productos y servicios al Sistema Agropecuario, Agroalimentario y Agroindustrial (SA).