En la Argentina la cosecha de trigo fue un 90% superior a la campaña precedente. La explicación de tan buenos rendimientos se atribuyó a los excelentes rindes (34,5 quintales por hectáreas versus 27 en 2009/10) y al área implantada que aumentó un 42% respecto al ciclo previo.

El mercado mundial de trigo muestra una carencia mayor a lo esperado de trigos de buena calidad no así en cantidad en la presente campaña. Hubo problemas en las zonas productoras de los EE.UU. y China por restricciones hídricas. En Australia debido a las excesivas lluvias a la cosecha hubo serios problemas de brotado. Rusia podría extender la prohibición de exportar trigo más allá de julio 2011 con el objeto de priorizar el abastecimiento interno luego de la gran caída de cosecha del último ciclo.

En un informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires del 27 de enero de 2011, dio por finalizada la cosecha de trigo 2010/11 con el 100% sobre un área efectiva de 4.347 millones de hectáreas. El rendimiento promedio final fue de 3,45 toneladas por hectáreas arrojando una producción de 15 millones de toneladas (MT).

En este contexto, la provincia de Buenos Aires es la que más aportó a la producción nacional con 8,1 MT, seguida por Córdoba con 2,1 MT, Santa Fe 1,7 MT, Entre Ríos 1,05, La Pampa 0,18 MT y el resto del país 1,11 MT.

Esta excelente cosecha también tiene su costado para mejorar. Como suele ocurrir en años de altos rendimientos la proteína cae junto con la cantidad de gluten y la calidad industrial de la cosecha. Además, se dio un efecto inverso a la cosecha 2009/10 en los que los bajos rindes, afectados por la sequía hicieron que la proteína y el gluten se ubicaran en niveles muy buenos.

Así, en el relevamiento realizado por el personal del Laboratorios de Calidad de Cereales y Oleaginosas del INTA de Marcos Juárez –Córdoba– en acopios y cooperativas de la región central del país, se muestrearon 263.000 ton. con una calidad comercial muy buena, acompañada por un buen llenado de grano.

La calidad comercial fue muy buena y traducida con excelentes valores de peso hectolítrico, peso de 1.000 granos y bajas cenizas en grano y harina, favorables para mejorar la extracción de harina en la molienda. La proteína fue 1% inferior a la cosecha pasada y el gluten también mas bajo, con fuerza panadera dentro de valores medios y alta estabilidad farinografica –valor deseado por Brasil–.

Por esto, más allá de lo rindes es clave que aumente la cantidad de proteína ya que de esta forma aumenta la cantidad de gluten y con él los demás parámetros representativos de la calidad industrial, cuya expresión va a depender también de la genética de cada trigo.

De esta forma, para la próxima campaña se recomienda a los productores reforzar la dosis de fertilización nitrogenada o hacer fertilización fraccionada a la siembra y macollaje, momento ideal para mejorar rendimiento y proteína a la vez.